Creación de valor en un mundo interconectado la función de los servicios
El comercio mundial está experimentando
un rápido cambio debido a la fragmentación
de los procesos de producción y
la integración de las economías emergentes
en el mercado global. Un factor clave en
la expansión de las cadenas de valor mundiales
(CVM) es el papel que desempeñan los servicios.
Las CVM no existirían si el transporte, la logística,
las finanzas, los seguros, la comunicación y
el resto de servicios empresariales no movieran
productos, personas y conocimientos a lo largo
de la cadena de valor. Las empresas coordinan
y vinculan las etapas de producción mediante los
servicios. La base de datos de comercio en valor
añadido de la OCDE y la OMC revela que los servicios
representan más del 30% del valor creado
en las cadenas de valor de la manufactura.
Asimismo, crece el número de servicios
que se proporcionan dentro de las cadenas
de valor internacionales. Actividades como la
investigación y desarrollo, la banca y los servicios
informáticos cada vez dependen más de los
centros de conocimiento ubicados en distintos
países. Ya que los encuentros cara a cara con
los clientes siguen siendo importantes, los servicios
se suelen producir de forma más cercana
al cliente. No obstante, esto no evita que algunos
insumos importantes se externalicen a lugares
donde se puedan encontrar las competencias
y el talento requeridos. La externalización de
servicios empresariales ofrece muchas oportunidades
para que los PED puedan unirse a nuevas
cadenas de valor de servicios y participar en la
economía digital.
Por consiguiente, la participación de los
servicios de valor añadido en el comercio ha
aumentado para todos. Si sumamos las exportaciones
directas de servicios domésticos,
los servicios incorporados en la exportación
de bienes domésticos, así como los servicios
extranjeros empleados como insumos en las
exportaciones, el conjunto total del sector de los
servicios representa, de media, el 45% del valor
del comercio en las economías del G20 (véase
la siguiente página). Esto es más del doble de la
participación medida previamente en términos
brutos (20%).
Incrementar el valor añadido a través de servicios basados en el conocimiento
Las funciones desempeñadas por los servicios
dentro de las CVM no se quedan aquí. Los servicios
no solo vinculan una etapa de producción
con la siguiente, sino que también tienen un
impacto importante sobre los modelos de negocio
y la definición de los productos. Por ejemplo,
los servicios basados en el conocimiento, a
menudo, ayudan a diferenciar los productos para
los distintos mercados o consumidores, añadiendo
valor durante el proceso. Los productores
cada vez se centran más en atender las necesidades
de sus clientes. Los fabricantes de vehículos,
por ejemplo, por un lado, ofrecen servicios financieros
para ayudar a sus clientes a adquirir sus
productos y, por otro, les proporcionan un servicio
de posventa y reparación.
Las inversiones en capital basado en el conocimiento
(CBC), y de forma más general en la
innovación, desempeñan un papel vital a la hora
de incrementar la productividad del sector de los
servicios y ayudar a los países a ascender por la
cadena de valor. En muchos países, la inversión
empresarial en CBC ha crecido de manera más
rápida que la inversión en capital físico, como la
maquinaría o el equipo. En los Estados Unidos,
por ejemplo, el CBC representa alrededor del 15%
del PIB y contribuye en un 20%-34% de media con
el crecimiento de la productividad laboral. En
algunas economías emergentes, como Brasil, las
inversiones empresariales en CBC también han
aumentado aunque no tanto como las inversiones
en activos tangibles.
Para fomentar las inversiones en CBC es
esencial que dispongamos tanto de mercados
de trabajo y productos eficaces como de sistemas
de financiación de la deuda y financiación
inicial. Asimismo, es importante contar con leyes
concursales que no penalicen en demasía la
quiebra. Reducir la severidad de estas leyes del
nivel más alto a un nivel intermedio en la OCDE podría aumentar los flujos de capital para las
empresas de patentes en cerca de un 35%.
De acuerdo con un estudio reciente sobre
la llamada 'servicificación' de la economía, los
servicios ya no deberían considerarse como
actividades complementarias sino como actividades
de valor añadido (véase el artículo en la
página 12). Esto es especialmente importante
en el contexto de las economías en desarrollo,
ya que su participación en las cadenas de valor
no se puede dar sin poner un nuevo énfasis en
los servicios.
Las políticas comerciales deben reflejar esta
nueva realidad. Las CVM obligan a los formuladores
de políticas a adaptarse a un mundo en el
que las ideas son tan importantes como los insumos
físicos, y los servicios son los facilitadores
de la creación de valor. Hoy en día, un negocio
exitoso no solo necesita costes competitivos y
acceso al mercado, sino también conocimiento
sobre los mercados y clientes extranjeros, altos
niveles de calidad y fiabilidad, así como cumplir
con los estándares mundiales. A fin de
poder alcanzar estos estándares, algunos de los
servicios requeridos deben ser importados o proporcionados
por sucursales locales de empresas
extranjeras. Por tanto, es esencial que los mercados
sean abiertos. Cuando los servicios locales
no son lo suficientemente eficientes, la lógica de la
cadena de valor dicta depender de proveedores
extranjeros. En este sentido, las importaciones
de servicios son vitales para las exportaciones
de aquellos países que aún no cuentan con un
sector de los servicios sólido.
Para otros servicios clave, y en especial los
que dependen de la red de infraestructuras local,
se deberán llevar a cabo reformas, con el fin de
mejorar las provisiones domésticas y hacerlas lo
más eficientes posible. Los gobiernos pueden
ayudar a desarrollar la capacidad de los proveedores
de servicios locales fomentando los
vínculos con empresas internacionales, reforzando
su capacidad de suministro y habilidad de
innovación, y facilitando la adopción de estándares
globales.
El mensaje es claro: es necesario disponer
de normativas de servicios eficientes para incrementar
tanto la productividad del sector de los
servicios como la del sector de la manufactura.
A pesar de que las reformas unilaterales
de los servicios son importantes, se pueden
obtener incluso más beneficios a través de
reformas multilaterales, ya que todos los
países, en mayor o menor medida, dependen
del acceso a proveedores de servicios
extranjeros.
Las políticas comerciales son una herramienta
necesaria, aunque no suficiente,
para aprovechar los beneficios que ofrecen
las CVM para el crecimiento inclusivo del
empleo y de los ingresos. A este respecto,
también es esencial optimizar el entorno
empresarial, invertir en personas, infraestructura
e innovación, así como disponer
de políticas sociales y del mercado laboral
complementarias. Por último, pero no menos
importante, las políticas de Ayuda para el
Comercio desempeñan un papel vital a la
hora de ayudar a que los países más desfavorecidos
accedan a las CVM.