Historias

Mejora de la calidad de vida en Uganda gracias a un mejor café

10 febrero 2014
ITC Noticias

Joseph Mayanja sabe bien cuál es el significado del verbo crecer, ya sea aplicado a los niños o a las plantas de café. Este agricultor de Masaka, Uganda, es padre de 13 niños, incluidos dos huérfanos adoptados. Con 71 años, aún es capaz de proporcionar el sustento a sus retoños más jóvenes con el cultivo de café en su plantación de 0.9 hectáreas.

"El pago de las matrículas del colegio era una carga muy pesada, pero ahora empiezo a ver la luz. Antes, cuando no producíamos mucho café, no podíamos ni cuidar de la casa. Sin embargo, ahora todo esto merece la pena", dijo.

Los granos que cultiva ahora Mayanja son "mayores y pesan más" que las que solía cultivar antes de recibir la formación ofrecida por la Unión Nacional de Empresas Agrícolas y Agronegocios del Café (NUCAFE), como parte del proyecto del ITC sobre el café de Uganda del Fondo Fiduciario Neerlandés (NTF) II, subvencionado por el gobierno de los Países Bajos.

Subiendo en la cadena de valor del café

Gracias a las sesiones de formación, Mayanja aprendió a podar las plantas de café, usar fertilizante, recolectar los granos de manera que se preservaran las ramas, secar los granos en toldos limpios y almacenar correctamente el café. El resultado de ello es un café de más calidad y con un precio de venta cuatro veces mayor.

"Nuestro modelo de autonomía agrícola nos ayudó a subir a otro nivel en la cadena de valor del café, dijo el Director Ejecutivo de NUCAFE, Joseph Nkandu. "Los agricultores han pasado de vender una materia prima más, a vender un café con valor añadido. Esta historia relata el empoderamiento de los agricultores, no la vida gracias a la caridad de otros."

Según Mayanja, antes de la asociación con NUCAFE, vendía los sacos de 60 kilos de café no procesado a unos 1.000 chelines de Uganda, o lo que es lo mismo a $EE.UU. 0,40 el kilo. En la actualidad vende los sacos de 40 kilos de café procesado a 4.350 chelines de Uganda, o $EE.UU. 1,73 el kilo. Mayanja es solo uno de las miles de personas que se beneficiaron del proyecto del café del NTF el año pasado. Gracias a este proyecto, más de 5.000 agricultores recibieron formación sobre la verificación del Código de Conducta del 4C, la norma de referencia del sector del café para la sostenibilidad.

Mayanja ahora gana lo suficiente como para pagar las matrículas del colegio y el seguro médico y cubrir las necesidades de la casa. Además, ahora puede hacer algunos gastos ocasionales para ocasiones especiales como banquetes de bodas u ofrendas a la iglesia.

Mayanja dispone ahora de una cuenta corriente, algo imposible antes de asistir a las sesiones de formación del ITC y NUCAFE y cultivar granos de café de mayor calidad, venderlos a un precio mayor y llevar un control de las finanzas. Después de varias sesiones de formación, él y su familia fueron capaces de desarrollar un plan a cinco años que incluía una lista de objetivos, como la compra de un ordenador para registrar los datos de todas las transacciones, construir un almacén para el café más grande y una bomba de agua para el riego de las plantas e invertir en un equipo para analizar el suelo.

La agricultura como negocio 

"Están haciendo de la agricultura un negocio", dijo Kakooza Hassan, Responsable de Negocios del Gremio de Caficultores de Masaka. "Ahora son agricultores que se centran en la obtención de beneficios y que diferencian los gastos de los ingresos gracias al registro de todos los datos."

Según David Muwonge, Subdirector Ejecutivo de NUCAFE, uno de los resultados más importantes del proyecto es el acceso a la financiación de los agricultores.

Los consejeros financieros independientes formados por el ITC trabajaron con 40 asociaciones de agricultores, que representan en torno a los 8.000 agricultores, con el objetivo de desarrollar planes de negocio financiables que enviaron a bancos locales. Al menos 15 asociaciones fueron capaces de conseguir crédito, con lo que se aseguró una financiación continua incluso en los períodos grandes entre cosechas.

Una de las asociaciones de agricultores que está incluida en el Gremio de Caficultores de Masaka consiguió un préstamo de 22 millones de chelines de Uganda en 2011, en 2012 un préstamo de 40 millones de chelines de Uganda y en 2013, 75 millones de chelines de Uganda.

Según el Sr. Muwonge, el préstamo que se espera para el próximo año es de 100 millones de chelines de Uganda. "Esto no constituye solo el acceso, sino también el crecimiento de la financiación proveniente de los bancos," añadió.

Al asegurar préstamos como los indicados anteriormente, NUCAFE puede ofrecer a los agricultores pagos en metálico por adelantado, con lo que se cambian las reglas del juego, ya que los comerciantes o intermediarios que tradicionalmente obtenían beneficios del hecho de disponer de dinero en metálico para comprar los granos de café a los agricultores ofrecían precios injustamente bajos.

Incremento de precios y de ventas

Ahora que las asociaciones de agricultores tienen más acceso a la financiación, los agricultores tienen más que un incentivo para unirse a ellas y trabajar de forma colectiva con otros agricultores para vender sus granos de café a precios más altos. También están aprovechando el conocimiento que les ofrece NUCAFE en la comercialización y creación de marcas con el objetivo de incrementar las ventas de café.

El número de asociaciones de agricultores ha crecido de poco más de 125 antes del comienzo del NTF II a 155 cuando este proyecto llegó a su fin en marzo de 2013. Desde que acabó el proyecto, el número ha seguido creciendo y ha llegado a 165. NUCAFE está ejecutando un proceso de segmentación de las asociaciones para poder responder a sus necesidades de acuerdo con su tamaño.

En los comienzos del NTF II, NUCAFE tenía un gran comprador de café, Caffè River, en Italia. Al final del proyecto, contaba con seis compradores. Hoy en día son 12 las empresas de todo el mundo que compran el café de NUCAFE.

El objetivo del NTF II era fortalecer la capacidad de NUCAFE para formar y apoyar a los agricultores para que estos se convirtieran en empresarios y exportadores autosuficientes. Uganda es ahora el mayor exportador africano de café tras sobrepasar a Etiopía. El sector emplea directamente a unos 3,5 millones de personas. La mejora de las condiciones de vida de los agricultores a través del incremento en la productividad y la eficiencia puede hacer una gran diferencia en las vidas de muchas personas.

"El café es un cultivo estratégico. Con el empoderamiento de los caficultores se consigue el de la nación," afirmó James Kizito-Mayanja, Oficial Principal de Información de la Autoridad de Desarrollo del Café de Uganda. "Esta es una intervención que mejorará a la larga la economía de Uganda y como resultado final, se reducirán los niveles de pobreza."