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Formular la política comercial como si los ODS realmente importaran

17 febrero 2016
ITC Noticias
¿Está listo el sistema de comercio multilateral para cumplir su objetivo
o debemos cambiar algo?

2015 se recordará como el año en el que las tendencias económicas mundiales dieron un giro. El concepto del desarrollo sostenible comenzó a tomar fuerza con la adopción de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), u Objetivos Mundiales, en septiembre, seguida por un importante acuerdo climático en diciembre. El año culminó con la sensación de esperanza de que quizá por fin podamos progresar hacia el desarrollo sostenible.

Sin embargo, la tendencia de la política comercial multilateral continuó oscilando. Tras 15 años de negociaciones entre los Miembros de la OMC en la Ronda de Doha, son pocos los que prevén una conclusión aceptable a corto plazo. De hecho, muchos observadores opinan que la Ronda está muerta y que solo queda que algún valiente lo certifique. Durante la Conferencia Ministerial en diciembre, la presidencia incluso declaró que la función de negociación de la OMC ya no funcionaba y que, quizá, debería desaparecer.

ACUERDOS COMERCIALES MEGA-REGIONALES

Mientras tanto, el ímpetu de la política comercial claramente se ha pasado a otros foros, principalmente a los denominados acuerdos comerciales 'mega-regionales', como el Acuerdo de Asociación Transpacífica (TPP) o la Asociación Transatlántica de Comercio e Inversión (TTIP), aunque en realidad su dinamismo solo impresiona si se compara con la OMC. La TTIP está lejos de concluir y parece ser que el TPP está teniendo problemas en la fase de ratificación.

Esto es un giro importante. No ha pasado mucho tiempo desde que la comunidad del desarrollo sostenible se estremecía ante la recientemente creada OMC y su poder para eliminar los obstáculos al comercio, incluyendo aquellos que se basaban en cuestiones ambientales y sociales. Si es cierto que ha llegado la era del desarrollo sostenible y que la globalización agresiva se tambalea, ¿qué lecciones debe extraer la política comercial? ¿Cuáles son las perspectivas para el añorado objetivo de un apoyo mutuo entre las políticas de comercio y sostenibilidad?

Por una parte, los últimos años han sido positivos. El anticipado desafío de los logros ambientales y sociales alcanzados por el sistema comercial nunca ocurrió. En su lugar, las cuestiones ambientales y, aunque en menor medida, también las sociales se han convertido en una parte aceptada de la política comercial. Cualquier acuerdo nuevo o ejecución de un acuerdo comercial existente que las ignorara o subestimara se encontraría con un reto.

El Órgano de Solución de Diferencias de la OMC ha mostrado un gran interés por los acuerdos ambientales intergubernamentales, y las normas y regulaciones ambientales nacionales se han encontrado con pocos obstáculos.

Asimismo, actualmente los acuerdos de comercio bilaterales y regionales incluyen de forma rutinaria acuerdos ambientales paralelos o disposiciones firmes sobre cooperación ambiental. Muchos, además, incluyen garantías relacionadas con los derechos humanos o las normas laborales. Por tanto, podemos afirmar que el comercio y el desarrollo sostenible ya no provienen de una posición hostil sino que asumen una compatibilidad mutua, aunque si analizamos esto en detalle es posible que no funcione tan bien como sería de esperar. No obstante, esto no basta.

Considerando el firme compromiso de todos los Estados miembros de la ONU de implementar los ODS para 2030, ¿está listo el sistema de comercio multilateral para cumplir su objetivo o debemos cambiar algo? Propongo dos respuestas alternativas.

En primer lugar, el comercio sin duda forma parte del paquete de ODS. Existen muchas formas en las que el comercio expandido y basado en normas puede acelerar la implementación de los ODS, especialmente mediante el impacto positivo que tiene el crecimiento del comercio sobre las economías de los PED. Las medidas y políticas comerciales son una parte importante del paquete de Objetivos Mundiales. La optimización de los beneficios del desarrollo del comercio se encuentra, al menos teóricamente, dentro del alcance del sistema multilateral de comercio, y esta mejora ayudaría a alcanzar los objetivos acordados.

OBJETIVOS PARA UNA TRANSFORMACIÓN GLOBAL

Esto también se puede ver desde otro ángulo. Los ODS pretenden alcanzar una transformación mundial pero tan solo una auténtica transformación mundial podrá proporcionar una base de sostenibilidad al desarrollo. Además, si los ODS se estiman necesarios es porque el paradigma económico actual no ha sabido alcanzar el desarrollo sostenible. De hecho, en muchos sentidos estamos más lejos de alcanzarlo que antes de que el paradigma neoliberal se asentase.

El sistema multilateral de comercio ha sido un fiel sirviente del paradigma económico actual, promoviendo la economía neoliberal basada en el Consenso de Washington. Si este modelo supone un impedimento para los ODS, el sistema comercial como se concibe actualmente también lo será. Si estamos avanzando en un sentido equivocado, no deberíamos acelerar el progreso en dicha dirección.

Hace algunos años, Dani Rodrik, Catedrático de la Universidad de Harvard, escribió un artículo para el PNUD titulado 'La gobernanza global del comercio como si el desarrollo realmente importara'. En él reflexionó sobre cómo sería un sistema comercial si el único objetivo de las políticas comerciales fuera el desarrollo equitativo de todos los países y sus habitantes. La conclusión obviamente fue que el sistema comercial sería muy distinto. Hoy, 15 años después, dicha conclusión se puede afirmar con más autoridad si cabe.

No podemos tener unos ODS que pretenden alcanzar una transformación mundial y crear un nuevo paradigma económico por una parte y un sistema comercial que actúa como un sirviente del antiguo y fallido paradigma por otra. Necesitamos un nuevo análisis: gestionar el comercio mundial como si la implementación de los ODS realmente importara. Nada que se aleje de dicha hoja de ruta y de su implementación garantizará que se alcance la transformación global que pretenden los Objetivos Mundiales y de la que depende el futuro de la humanidad.