Historias

Exportadores comoranos de vainilla y clavo obtienen financiación con la ayuda del ITC

20 marzo 2018
ITC Noticias
El proyecto refuerza las cadenas de valor de ylang ylang, vainilla y clavo de la Unión de las Comoras

Tres empresas cooperativas de las Comoras han obtenido financiación comercial por valor de más de 400 000 dólares para el cultivo y la exportación de vainilla y clavo gracias a un proyecto conjunto del Centro de Comercio Internacional (ITC) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Los préstamos demuestran cómo con pequeñas cantidades se pueden lograr grandes diferencias en la capacidad de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas (mipymes) para exportar de forma competitiva. La financiación se obtuvo a través de un proyecto del Marco Integrado Mejorado (MIM) concebido para conectar los tres cultivos comerciales más importantes de las Comoras con las cadenas de valor mundiales.

El ITC ayuda desde 2014 a las partes interesadas de la cadena de valor de la vainilla, el clavo y el ylang ylang a organizarse en 11 empresas cooperativas en las tres islas de las Comoras, en el océano Índico: Gran Comora, Anjouan y Mohéli. Yaya Ouattara, Asesor del ITC para Acceso a Financiación e Inversión, declaró: «Una estructura empresarial cooperativa reparte los riesgos y los ingresos entre sus miembros y facilita su acceso a la financiación. Además, refuerza su capacidad de producción, lo que las hace más atractivas para los compradores internacionales».

Los agricultores y las mipymes de las cadenas de valor de la vainilla, el clavo y el ylang-ylang tienen que hacer frente a elevados costos de transacción y a la falta de información precisa sobre los mercados. Por otra parte, suelen poseer pocas garantías para solicitar préstamos. Los fondos disponibles estaban limitados a los fondos generados internamente, a los préstamos de familiares y amigos, o a créditos de prestamistas a altos tipos de interés, por lo que los operadores de estos tres sectores eran incapaces de ampliar su producción ni de invertir para mejorar la calidad de sus productos. El ITC ha trabajado con los bancos, los productores y las empresas procesadoras para mejorar la organización, los perfiles crediticios, los procedimientos de evaluación de riesgos y la información sobre los instrumentos financieros disponibles con el fin de superar estas limitaciones y reducir los riesgos de impago percibidos por los bancos.

«Este proyecto está obteniendo unos resultados increíbles. Es la primera vez que un banco comercial (el Banque pour l'Industrie et le Commerce, también conocido como BIC) concede préstamos a productores agrícolas de las Comoras. Hasta ahora, solo las cooperativas de ahorro y crédito, Meck y Sanduk, financiaban al sector agrícola. El proyecto ha demostrado que los agricultores pueden atraer inversiones cuando forman parte de empresas cooperativas con garantías mutuas y se les ofrece un asesoramiento adecuado en materia de administración empresarial y financiera», afirmó Emma Ngouan-Anoh, Representante Residente Adjunta para el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en las Comoras.

«Hemos autorizado una solicitud de préstamo de 64 millones de francos comoranos (155 407 dólares) a un tipo de interés del 8 % para la empresa cooperativa de clavo KARANFOU NDJEMA. Estos fondos se destinarán a cosechar el equivalente a 22 toneladas de clavo para la exportación. Si la experiencia piloto es positiva, en pocos meses el BIC de Anjouan concederá de buen grado la suma total de 4 millones de dólares solicitada por la empresa cooperativa para la adquisición de 55 contenedores, es decir, 605 toneladas, de clavo para la exportación», afirmó Housnat Mdjassiri, Director Gerente del BIC de Anjouan, la sucursal local de BNP Paribas.

El ITC favoreció los acuerdos contractuales entre las cooperativas y las instituciones financieras. Las cooperativas de ahorro y crédito Meck y Sanduk han acordado conceder préstamos a un tipo de interés más reducido, del 8 % anual, porque un grupo de consultores de gestión financiera (CGF) trabajó con los procesadores y sus agricultores proveedores para reducir los riesgos y mejorar la contabilidad. En el marco de ese mismo proyecto, el ITC capacitó en 2016 a seis CFG para ayudar a las cooperativas a evaluar su capacidad de préstamo, elaborar balances generales, presentar planes de negocio y contactar con las instituciones financieras. Los consejeros también ofrecen orientación posterior a la financiación, trabajando con los receptores de los préstamos en la mejora de sus capacidades técnicas y de gestión y en la presentación de informes sobre el uso de los fondos. Como resultado de ello, los CGF mitigan los riesgos asociados a la obtención de financiación por primera vez, animando así a las instituciones financieras a conceder préstamos a las mipymes (y a tipos de interés más asequibles).

«Las deudas y el sector bancario siempre me han asustado porque no comprendo los requisitos bancarios ni los productos disponibles para los productores y destiladores de ylang ylang como yo. Todos los miembros de nuestra empresa cooperativa están seguros de que este proyecto cambiará la perspectiva de los bancos con respecto al sector agrícola y, por ello, darán luz verde a la financiación», declaró Nafouanti Daroussi, productora y destiladora de ylang ylang y miembro de la empresa cooperativa Producteurs Distillateurs et Exportateurs des Huilles Essentielles de Mohéli (COOPDEHEM) de la isla de Mohéli.

El proyecto del MIM también ha propiciado la creación de la Oficina Nacional de la Vainilla, inaugurada en junio de 2017 por el Presidente de las Comoras, Azali Assoumani. Esta oficina nacional servirá como órgano normativo y rector del sector de la vainilla, al que el Presidente se refirió como la piedra angular del desarrollo del país.

Está previsto que el proyecto concluya en diciembre de 2017, tras haber ayudado a 11 empresas cooperativas a lograr una adición de valor sostenible a escala local y suministrar directamente productos naturales de alta calidad a los mercados internacionales.