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Combatir la pobreza a través del comercio

7 marzo 2016
ITC Noticias
El comercio, la igualdad de género y el trabajo duro son esenciales para el crecimiento sostenible

El comercio es esencial para el desarrollo y el crecimiento. Si bien tenemos claro que no se trata de una batalla rápida, la lucha contra la pobreza no se puede ganar sin comercio, una mayor producción y creación de empleo. Es por esto que el Gobierno de Noruega hará un mayor uso del comercio como una política de desarrollo para ayudar a integrar a los países más desfavorecidos en la economía mundial.

La historia muestra que la obstrucción del comercio exterior y la inversión extranjera rara vez conduce a un crecimiento económico sólido y sostenible. Por otro lado, aquellos países que desean adherirse a la Organización Mundial del Comercio (OMC) quieren utilizar el comercio para desarrollar sus economías. Este tipo de decisión política concede derechos pero también conlleva obligaciones. En la Conferencia Ministerial de la OMC el pasado diciembre se celebró la adhesión de Liberia y Afganistán, dos países menos adelantados (PMA) con diferentes problemas. También se firmó el Paquete de Nairobi, que abarca la agricultura, el algodón, así como las normas y el trato preferenciales para los PMA.

Como principal defensor mundial del comercio, la OMC continúa siendo un baluarte contra el proteccionismo y ofrece un marco común para el comercio internacional. Proporciona un foro donde los PMA pueden colaborar para promover sus intereses como grupo. Desde una perspectiva de desarrollo, el principal objetivo de las políticas comerciales debería ser reforzar la OMC.

APERTURA DEL MERCADO

A los intereses de exportación de los PED no se le ha prestado la atención suficiente en las negociaciones de la OMC. Necesitamos aumentar la atención en los beneficios que podrían obtener los PED de una apertura del mercado. La ejecución de los compromisos de la OMC también supone una importante herramienta política para cosechar los frutos del comercio internacional. Un sistema comercial abierto basado en normas es bueno para el comercio, tanto a nivel mundial como nacional. La previsibilidad y la estabilidad son esenciales para crear un entorno que favorezca una competencia justa y el desarrollo del sector privado que, a su vez, puede ayudar a desarrollar economías a gran escala, incluidas aquellas de los países más desfavorecidos.

Los PED son un grupo muy diverso y su potencial para beneficiarse del comercio internacional varía enormemente. Esto mismo ocurre con los compromisos que pueden adoptar. El trato especial y diferenciado para los PED no debería significar solo que se quedan fuera del marco de comercio multilateral. Más bien se deberían identificar sus necesidades específicas con el fin de incluirlos.

También es importante ayudar a los PED a poner en práctica los acuerdos. Estos acuerdos se deberían adaptar mejor a la situación específica de cada PED, como se ha hecho en el reciente Acuerdo de Facilitación del Comercio de la OMC. Se trata de un acuerdo innovador; los requisitos para implementarlo dependen de la capacidad que cada país tiene para hacerlo. Los países deberían recibir asistencia y apoyo para alcanzar dicha capacidad.

El comercio Sur-Sur ha aumentado significantemente durante los últimos 20 años, especialmente gracias a China y a otras economías emergentes. No obstante, los países más desfavorecidos también necesitan participar en este comercio Sur-Sur: para los PMA con recursos limitados, comercializar con sus países vecinos es, a menudo, el primer paso hacia la participación en el mercado mundial.

BENEFICIOS MUTUOS

A veces, las barreras al comercio entre los PED pueden ser mayores que entre ellos y los países desarrollados. Superarlas, y reforzar el comercio y la cooperación entre países vecinos puede conducir a patrones comerciales más diversificados. Los derechos y las obligaciones de la OMC también podrían otorgar beneficios mutuos en lo que se refiere al comercio entre vecinos, entre PMA, y entre PMA y otros PED.

Si bien el acceso al mercado es importante, no es suficiente para mejorar la situación de los países más desfavorecidos. La participación de los PMA en el comercio mundial sigue estando muy por debajo de lo deseado; según datos de la OMC, en 2013 era de tan solo un 1,23%. Por tanto, se requiere una mayor cooperación para el desarrollo que ayude a estos países a incrementar sus exportaciones. Los países afectados y la comunidad internacional comparten la responsabilidad para superar estas limitaciones. En este sentido, es preocupante que solo tres de los diez mayores receptores de Ayuda para el Comercio (APC) desde 2006 hayan sido clasificados como PMA (Panorama de la Ayuda para el Comercio, OCDE, 2015).

Los países más desfavorecidos deberían recibir una mayor proporción de la APC, así como de la asistencia oficial para el desarrollo en general. Estos, por su parte, tendrán que demostrar un interés real por facilitar el desarrollo del comercio y del sector privado.

Otro factor clave para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza es la igualdad de género. Es esencial integrar la perspectiva de género en todas las políticas de desarrollo y comercio. Demasiadas veces los políticos pasan por alto las contribuciones de las mujeres y los desafíos particulares a los que estas tienen que hacer frente. Si los PED desean explotar todo su potencial comercial, deben incluir a las mujeres en el proceso.

Si bien es cierto que el comercio es un motor de crecimiento económico, no existe un vínculo directo entre el comercio y la reducción de la pobreza. También se requieren unos esfuerzos dirigidos para promover el desarrollo empresarial y la creación de empleo, así como un sistema fiscal, una sanidad y una educación eficientes para que las personas tengan una oportunidad real de salir de la pobreza. De hecho, nadie 'sale' de la pobreza, siempre hay un gran esfuerzo detrás.