Integración de los PMA en la economía mundial

La integración de los PMA, la mayoría ubicados en África, en la economía mundial es esencial para fomentar la estabilidad y conseguir que la prosperidad alcance a todos.

Estos 48 países tan solo son responsables de un escalofriante 1% del comercio mundial. El reto más grande reside en la construcción de carreteras y puertos, así como en la reducción de la pobreza. Asimismo, es vital abordar el desempleo juvenil, especialmente teniendo en cuenta que la mitad de la población de África no alcanza los 20 años. Se calcula que tan solo la falta de infraestructura en el continente asciende a la suma de $EE.UU. 90.000 millones anuales.

Con el fin de fomentar el crecimiento y el desarrollo de los PMA, se necesitarán una importante inversión extranjera, así como un gran avance en lo que se refiere al comercio internacional. Esto solo se puede conseguir a través de una mayor interacción con el sector privado. Una impactante lista de mercados fronterizos, incluidos Ghana, Kenya, Mauricio, Mozambique, Nigeria, Senegal, Tanzanía, Uganda y Zambia, han atraído grandes inyecciones de inversiones extranjeras directas en los últimos años, sin embargo, un enfoque centrado únicamente en el crecimiento podría aumentar aún más la desigualdad de ingresos y dañar al medio ambiente.

Para aumentar las inversiones empresariales y el comercio transfronterizo, los PMA tienen que remodelar sus relaciones con el sector privado. Deben llevar a cabo reformas en diferentes áreas.
Ya que el 90% de la mano de obra de los PED se concentra en las PYME, parece tener sentido que las reformas de los PMA se centren en ellas. El 80% del comercio mundial tiene lugar en las cadenas mundiales y casi la mitad del valor que se añade en ellas procede de PYME locales.

Las asociaciones con empresas para crear y financiar puertos, aeropuertos y la generación de energía renovable transformarían las economías y las vidas de las personas y, además, proporcionaría un crecimiento económico a largo plazo. Los gobiernos de los PMA no tienen los medios para actuar solos. Para que estas asociaciones funcionen se requiere una clara división de tareas entre ambos sectores, así como un acuerdo claro sobre la industrialización.

El establecimiento de políticas que atraigan las inversiones extranjeras y sostengan principios claves, como un trato nacional o de nación más favorecida, significa que los extranjeros y los locales tienen los mismos derechos, beneficios y privilegios en lo que se refiere a los bienes importados y locales, así como a los acuerdos internacionales.

Una de las mayores fuerzas multiplicadoras para el desarrollo proviene de una mayor inversión en tecnologías de la información y la comunicación (TIC), que tiene la capacidad de aumentar la productividad en un 50% y elevar sustancialmente el producto interior bruto (PIB). De hecho, cada vez que el PIB aumenta un 5%, se duplica el nivel de vida de una generación entera. Un mayor acceso a las TIC generaría 150 millones de trabajos para los jóvenes africanos de aquí al 2020.

Otro paso importante para integrar a los PMA en la economía mundial es ratificar y poner en práctica el Acuerdo sobre Facilitación del Comercio (AFC) de la OMC. Por su parte, mejorar los trámites fronterizos y aduaneros, junto con otros elementos del Acuerdo de Bali para reducir las barreras globales al comercio, puede ayudar a crear 18 millones de trabajos en economías en desarrollo y garantizar a los consumidores que los alimentos perecederos no se estropearán, lo que es vital para las personas más desfavorecidas del mundo.

Sin embargo, por encima de todo, el comercio necesita un entorno estable y predecible para las políticas y las inversiones, ofrecido por unas instituciones fuertes e incorruptibles que perduren. Una cooperación público-privada, que garantice que ambas partes se beneficien en lugar de penalizarse, puede ayudar a crear un entorno así. La creación y utilización de acuerdos y procedimientos que sean predecibles y transparentes, como los que figuran en el AFC, pueden ofrecer los medios necesarios para conseguirlo.