El riego hace florecer los medios de vida de los kenianos
John Ndegwa de Kiambu, Kenya, se gana
la vida vendiendo botellas de agua. Sin
embargo, ahora quiere utilizar el agua
para cultivar otro tipo de negocio.
'Conseguí esta tierra hace dos o tres
años', nos cuenta este joven de 32 años que
se está adentrando en la agricultura. 'Había
permanecido intacta durante muchos años y
pensé: ¿por qué no la cultivo?'
Su parcela, que apenas abarca 0,1 hectáreas
y se ubica a unos 40 km al nordeste
de Nairobi, está rodeada de áridas llanuras.
Ya que un pozo de perforación habría sido
'muy costoso', el Sr. Ndegwa escogió una
opción más económica: el riego por goteo.
A principios de año adquirió un kit de invernadero
de Amiran Kenya, que se autodefine
como una tienda con todo lo necesario para
la agricultura, que contenía un sistema de
riego por goteo, un invernadero, semillas,
fertilizantes y productos químicos, e incluía
formación presencial y asistencia in situ.
Emma Wanjiru, agrónoma de Amiran
Kenya, visitó al Sr. Ndegwa para ver el
progreso de su campo de cebollas y de los
tomates que crecen en el invernadero. Asimismo,
le asesoró y contestó a sus preguntas.
'Puedo hacer una bola; eso significa que
hay suficiente agua', le explicó mientras le
mostraba los puños cerrados llenos de tierra.
'Es importante darles suficiente agua hasta
que se desarrollen las raíces.'
TRADICIÓN Y TECNOLOGÍA
La agricultura, que continúa siendo
una de las principales industrias de Kenya,
representó el 30% del producto interior
bruto en 2012, según el informe Perspectivas
Económicas de África 2014 sobre
Kenya. El informe también muestra que el
sector registró un aumento de la producción
durante los dos primeros trimestres de 2013
del 8% y 5% respectivamente, en comparación
con el 2% durante el mismo periodo
en 2012.
Según la Unidad de Inteligencia de The
Economist (EIU), en África la agricultura
es un motor de crecimiento económico, ya
que los pequeños agricultores refuerzan sus
producciones con la ayuda de las asociaciones
público-privadas y las políticas agrícolas
nacionales. La EIU señala que el Gobierno
de Kenya, por ejemplo, financia el Proyecto
de seguridad alimentaria Galana-Kulalu
($EE.UU. 42 mill.) para incrementar la producción
de cultivos, ganado y pescado para
el consumo doméstico y la exportación.
La tecnología moderna es cada vez más
importante en este sector tradicional. Hoy,
más del 60% de los hogares de Kenya disponen
de un teléfono móvil.
Mientras inspecciona los tomates verdes
del invernadero, la Sra. Wanjiru nos explica:
'Si no acudo personalmente, el agricultor solo
tiene que enviarme unas fotos a través de la
aplicación móvil WhatsApp.'
La facilidad y velocidad del intercambio
de información hace posible que los agricultores
solucionen sus problemas rápidamente,
y los beneficios son tangibles.
'Pensamos que plantamos una semilla,
esta crece sola y ofrecemos tal precio'
nos declara el Sr. Ndegwa. 'Esto no es así,
cuando tienes una buena cosecha posees un
poder de negociación para obtener mejores
precios.'
SOBREPASAR LO HABITUAL
A fin de recibir mejores precios por sus
productos y asegurar unos ingresos estables,
los agricultores deben comenzar a generar
productos con valor añadido, nos señala
Wariko Waita, Director de Relaciones Externas
y Movilización de Recursos de la Cruz
Roja de Kenya, La organización se esfuerza
por mejorar el nivel de vida de los pequeños
agricultores.
'Muchos acuden a nosotros no por cuestiones
de hambre sino para averiguar dónde
está el mercado', nos cuenta el Sr. Waita.
'Dejan atrás la dependencia para avanzar
hacia la sostenibilidad y la producción; ya no
es una mera cuestión de supervivencia. Por
esta razón nos centramos en el valor añadido.'
Los productos de valor añadido, como la
fruta deshidratada, las mermeladas o salsas,
se venden a precios más altos que las frutas
y verduras frescas, que tienen una fecha de
caducidad más corta y son menos competitivas
en los mercados regionales y mundiales.
Kenya es miembro de varios bloques regionales,
entre ellos la Comunidad del África
Oriental (CAO), el Mercado Común de
África Oriental y Meridional (COMESA),
y la Autoridad Intergubernamental para el
Desarrollo (IGAD).
'Queremos ver más allá de los productos
tradicionales. No queremos centrarnos
en el té o café, ya lo hemos hecho durante
mucho tiempo', explica el Embajador Nelson
Ndirangu, Director de Economía y Asuntos
Comerciales Exteriores del Ministerio de
Asuntos Exteriores de Kenya. 'Debemos centrarnos
en los productos no tradicionales, de
calidad y alto valor.'
MEJORAR LA COMPETITIVIDAD
Con el fin de promover el valor añadido,
el Gobierno y el sector privado de Kenya
están trabajando con el ITC en un proyecto
titulado 'Supporting India’s Trade Preferences
for Africa'. El programa está destinado
a fomentar las exportaciones a la India de
cinco sectores de alta prioridad en Kenya,
Etiopía, Rwanda, Uganda y la República
Unida de Tanzanía.
Estos esfuerzos de promoción del
comercio están ayudando a mejorar el perfil
económico mundial de Kenya. El Índice de
Competitividad Global más reciente del Foro
Económico Mundial muestra que Kenya ha
ascendido 10 posiciones y que en 2013-2014
ocupaba el lugar 96 de 144 naciones.
SEMBRAR NUEVOS NEGOCIOS
El Sr. Ndegwa se siente ilusionado por
poder hacer negocios en su país. Algún día le
gustaría complementar la venta de verduras
con la producción de salsas de sus tomates.
De momento, se centra en su primera
cosecha.
'Necesito recuperar mi inversión', declaró
explicando que ha gastado alrededor de
700.000 chelines kenianos ($EE.UU. 8.000)
para crear su huerta. 'Necesito obtener beneficios.
Mi actividad agrícola no termina aquí.
Aún no.'
Si bien quedan algunas estructuras por
construir y elementos por reparar, el huerto
ha avanzado mucho desde que comencé a
trabajar en él en febrero.
'Claro que han existido altibajos', nos
cuenta cerca de su campo de cebollas. 'Lo
que quiero es ver el resultado y actuar en
consecuencia. Si es bueno, quiero hacerlo
mejor. Si es malo, quiero hacerlo bueno.
Mis ingresos serán los que me muestren el
resultado.'